sábado, 27 de agosto de 2011

Una farsa

Nadie está condenado al gatuperio. No está previsto ni lo menciona o prevé ningún código.

No hay humano tan cruel que quiera eso para sus semejantes.

—¿Y para sí mismo?
—No sería una condena, sería un premio...

- - -

El duodécimo gatuperio

2 comentarios: